Publicada en el periódico Il Tirreno (de la Toscana, Italia), el
22 de marzo de 2007
Corrado Malanga, de 56 años, spezzino de nacimiento (La Spezia ), investigador de química orgánica en la Universidad de Pisa,
investiga, prácticamente toda su vida, los objetos volantes no identificados.
Un interés que nació hace 38 años (hace pocos ha
salido a la venta su último libro “Alienígenas o Demonios”). ‘Quien se ocupaba
del tema UFO habían sido siempre historiadores, periodistas y también
filósofos, pero nunca científicos. Por eso me presenté a la primera convención
del CUN (Centro Ufológico Nacional), llevando una relación sobre las huellas
dejadas en el suelo por vehículos extraterrestres, analizadas a través de la
espectrometría de masa y espectrometría de resonancia magnética nuclear. Todo
con la idea de transformar el lenguaje ufológico en lenguaje científico,
operación que fracasó porque fue rechazada sistemáticamente, justo por los estudiosos.’
A un cierto punto, hace más o menos veinte años
Malanga apareció en los grandes medios de comunicación (el inserto
“Todociencia” de La Stampa le dedicó
una página y recibe invitaciones a la radio y televisión, RAI incluida).
‘Piensen que solo en 2006 he recibido unos 12 mil
correos de víctimas de los alienígenas y que en los primeros meses de este año
(2007) son ya varios centenares. Según mis datos, más del 1% de la población
italiana, cerca de 650 mil personas, han sido raptadas, analizadas y liberadas;
en Toscana el porcentaje permanece invariable, con por lo menos 35 mil personas
implicadas, muchas de ellas residentes en la provincia de Pisa, Livorno, Lucca,
Massa Carrara y Firenze’.
‘La
Ufología –explica Malanga –se había siempre ocupado de
analizar fotografías, huellas o estructuras moleculares del terreno. Sin
embargo, yo quería, mirar en la cabeza de los sujetos que decían haber vivido
experiencias con los UFO. Por esto he utilizado las técnicas de la hipnosis
regresiva elaboradas por el psiquiatra americano Milton Erickson, basadas en el
examen del inconsciente, visto como un ‘disco duro’, con funciones de sola
escritura: una vez grabadas las experiencias, no se pueden modificar. Una
técnica -sostiene el investigador- que no permite contar mentiras, como se ha
demostrado en la literatura científica relativa a este argumento. Pero para
verificar si los sujetos dicen la verdad, utilizo la conocida PNL (Programación Neurolingüística), una
ciencia basada en el axioma: “Dime como te mueves y te diré quién eres”, con el
movimiento del cuerpo que permite distinguir entre recuerdos reales y recuerdos
falsos. Además de un test articulado sobre preguntas y respuestas que –explica Malanga-
nos sirve como elemento discriminador’.
‘Historias idénticas’, dice el investigador, que se
refieren a personas que ni siquiera se conocen. ‘Algunas historias son iguales
hasta en los más mínimos detalles –añade– incluso, por ejemplo, las
descripciones de los alienígenas, referidas a cuatro tipos diferentes’.
¿Por qué -preguntamos a Malanga- estos alienígenas,
demasiado curiosos, tendrían tanto interés en nosotros?
Malanga: ‘Parecen muy hambrientos de nuestra
energía vital, y quieren repartirse esta especie de gasolina que emana de
nuestros cuerpos. Políticos, científicos, servicios secretos e iglesia, saben
de fenómenos que prefieren ignorar, por tanto, defenderse es tarea de cada individuo.’
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